El Budismo es el nombre dado modernamente al Buddha Dharma, un filosofía de vida creada cinco siglos antes de Cristo por un príncipe de los Sakhya nacido en el sur de Nepal con el nombre de Sidharta Gautama y conocido como Shakyamuni el Buda. El Sobrenombre de: El "Buddha"  significa "el despierto".
El
Buda fue un buscador del Dharma o Ultima Realidad de todas las cosas.
El Budismo Yogacarino

Yogacaras (escuela del Yoga Budista o solo existe la mente).

Hemos visto ya como el Mahayana, a través de sus distintas escuelas, fue poniendo el acento sobre aspectos un poco olvidados de las primeras enseñanzas budistas; cada uno de estos acentos, la compasión o la fe por ejemplo, eran el fundamento y la identidad de las nuevas escuelas. Lo mismo ocurrió con la escuela de los Yogacarinos, ellos quisieron profundizar el tema del trance, que había sido relegado a segundo plano por las sucesivas escuelas. Pero a su vez la escuela Yogacarina resultaba bastante más elitista que las escuelas que fomentaban la compasión, el vacío o la fe: presuponían cierta familiaridad con el trance (samadhi) para poder entenderla. Centraron su atención en la visión del mundo “que se revela al retirarse” con el trance. Los primeros indicios de lo que sería la escuela Yogacara nacen en los primeros siglos postcristianos, con un rasgo distintivo: se critica a aquellos que por perseguir la sabiduría han dejado de lado el cultivo del trance, cuando en realidad (según los ortodoxos sobretodo) no se puede obtener la iluminación sin esas “dos alas”: la sabiduría de los Dharmas y la sabiduría del trance; y su crítica apuntaba sobretodo a los Sarasvativadinos y Madhyamikas, demasiado enfocados en los Dharmas y muy poco en las prácticas para alcanzar el trance; según los Yogacarinos, los Dharmas conducen a la introspección, mientras que el trance conduce a la calma. Contrariamente a algunos de sus colegas, que profesaban que el Absoluto era vacío, los Yogacarinos enseñaban que el Absoluto era pensamiento, asunto que ya había sido mencionado en las primeras escrituras pero que fue reoxigenado por los yoguis. Mientras que el Abhidarma insistía en que la realidad estaba compuesta por fracciones llamadas Dharmas, los yoguis ofrecían su fórmula: la realidad está compuesta solo de pensamientos (citta-matra); pero esta parte fundamental de su doctrina se enfrentaba en su época a numerosas escuelas que despreciaban el pensamiento o que al menos le daban muy poca importancia: los budistas chinos por ejemplo, cuya meta era precisamente el “no pensamiento”. El Absoluto es pensamiento, según la escuela Yogacara, en el sentido de que no se halla en ningún objeto sino tan solo en los seres puros e incondicionados, que no dependen de ningún objeto.
La escuela Yogacara la fundan dos hermanos en el 400 d.C., Asanga y Vasubandhu, en el noroeste de la India, quienes postulan la doctrina agrupándola en cuatro centros: el “absoluto es pensamiento”, la “conciencia de almacenamiento”, las tres clases de ser y los tres cuerpos de Buda. En esta escuela nació también una nueva versión de la lógica budista, fundada por Dignaga, muy útil durante la edad Media India pues se organizaban torneos donde ascetas y maestros en debate se ganaban patrocinios reales a través de su habilidad en los debates y sus elaboraciones lógicas.
La escuela Yogacarina estuvo también opuesta al Abhidarma puesto que proponía nuevos modelos de pensamiento, pero al igual que el Hinayana y todo el Budismo, desapareció de la India (por el año 1100), aunque logró establecerse en China y Japón; en China fue introducida por dos grandes maestros: Paramartha (500-569) y Hiuentsiang (650), y en Japón por la secta Hesso (653). Uno de los nuevos modelos de pensamiento era el tratamiento mismo que se le daba a algunos conceptos antiguos; la tradición prefería usar términos negativos para referirse a los conceptos: no decían vida eterna sino no morir, por ejemplo, lo mismo el Nirvana, que significaba “estar inflado”. Los Yogacarinos se “desvían” de la tradición y llaman al Absoluto del Nirvana por una de tres palabras que en la filosofía Budista parecen ser “intercambiables”: el Absoluto es solo mente, solo pensamiento, solo conciencia. Querían con esto, por sobretodo, identificar al sujeto con el objeto: si todo es pensamiento no hay ya diferencia entre objeto y sujeto. Pero este “imposible” solo lo podían lograr por medio del trance, por la enseñanza que el trance mismo ofrece, y tras haberse apartado drásticamente de todos los objetos y los pensamientos de los objetos hasta obtener la pureza imprescindible. Esto estaba sistematizado por los Dhyanas, que al fijar su atención en un solo objeto eliminaban al mismo tiempo la atención hacia la multitud de objetos que generalmente rodea a los hombres. También se inventarían nuevos métodos de concentración para lograr la calma, agrupados bajo el método Yoga. “El mundo externo es en realidad la mente misma”, no es la proyección de la mente, sino la mente misma; ayudaba a esta concepción las particulares alucinaciones de quienes alcanzaban el trance, alucinaciones que según los sabios eran meros “pensamientos”, y que ciertamente, si no ampliaban la concepción del mundo en el individuo, al menos hacían dudar sobre la exclusiva objetividad de aquel.
También hubo otros conceptos introducidos por el Yogacara; uno de ellos fue el de la “consciencia de almacenamiento”, entendido como el ser supraconsciente que habita junto a nosotros o que nosotros mismos somos: este era un punto delicado que causó mucha polémica desde los inicios del Budismo; la antigua Escuela negaba la personalidad, y negaba también la existencia del ser negándola como una simple invención para tratar de identificar con un nombre a los Skandhas; para el Hinayana no había ser sino simplemente un conjunto de Dharmas momentáneos, muchas veces inconexos, que no podían ser considerados como un ente continuo; pero dadas las presiones y quizás debido a la evidencia misma del ser (¿si defendían la reencarnación como no habrían de aceptar la existencia de un ser?) las diferentes escuelas optaron por darles nombres particulares: Continuum de vida subconsciente (bhavanga) de los Theravadinos, o “existencia continuada de una Consciencia muy sutil” para los Sautrantikas, “consciencia de raíz” para los Mahasanghikas”; y para los Yogacarinos, la consciencia de almacenamiento, donde todos los hechos y experiencia pasados quedaban almacenados. También sistematizaron y dividieron en clases a lo existente, o más bien, consideraron tres perspectivas para delimitar lo existente: la apariencia, tal y como lo percibe el sentido común, donde cada existente es diferente de otros; la dependencia, o la relación de cada “ser”, objeto o existencia con otros existentes, su condicionamiento; y finalmente, su “Talidad”, su “trascendencia e inmanencia”, percibida por la intuición del yogui. Para terminar hay que mencionar su interés por los tres cuerpos de Buda: el cuerpo de Dharma, sin el cual los otros dos no podrían existir, el cuerpo de goce y el cuerpo de aparición; solo diremos que la noción de cuerpo de aparición existía ya en la religión hindú, y que el Hinayana contaba de Buda que mientras él pedía limosna, su cuerpo de aparición, el nimitta-Buda, predicaba en otra parte. Esto está muy relacionado con las prácticas mágicas y con el trance, pues el mismo Buda decía que todo era un espectáculo mágico, Maya en sánscrito, y que cada cual vivía en su Maya. El énfasis en la magia por parte del budismo, que hacía aparición tardíamente, ocasionaría gran influencia en la posteridad, ayudado por el muy antiguo concepto, prebúdico, de que la realidad está encantada: se formaría entonces una nueva escuela, que basaría su doctrina en los poderes mágicos: el Tantra, o budismo mágico.

El budismo es una religión no teísta perteneciente a la familia dhármica y a la subfamilia nastika de religiones. Su complejidad y diversidad hace que también sea estudiado o descrito en ocasiones usando términos adicionales como: fenómeno transcultural, filosofía, método de trasformación6 o sistema ético

Hoja de Ficus religiosa o Higuera sagrada, la especie a la que pertenece el árbol bajo el cual despertó espiritualmente el fundador histórico del budismo.

El propósito del Budismo es la erradicación definitiva del sufrimiento, insatisfacción vital, o descontento que se manifiesta de manera inevitable en algún u otro momento de toda vida común porque esta es imperfecta. Acorde al pensamiento budista, las causas auténticas de la insatisfacción, frustración o tensión son el anhelo ansioso, deseo o ‘sed‘ y sus concomitantes (aferramiento, aversión, temor).

Las Tres Realidades
Esta enseñanza fundamental del budismo explica cómo es la naturaleza de los fenómenos y objetos del mundo percibido, los cuales poseen tres características universales:
Anitya: transitoriedad, cambio o inestabilidad.
Anātman: insustancialidad, "no-yo" o inexistencia de un sí-mismo.
Duḥkha: cualidad de producir descontento o insatisfacción.

El Loto (Padma) es el símbolo del Despertar; las raíces están rodeadas de lodo (las pasiones humanas) mientras que la hoja y la flor se abren hacia el sol (Pureza).


El surgimiento condicionado es expuesto en el Maha-nidana Sutta o "Discurso de las causas". Constituye una formulación elaborada del proceso de existir y de cómo los seres están atrapados por la ignorancia en un ciclo de sufrimiento. Este proceso es constante, y supone una explicación que abarca tanto la duración de todas las vidas pasadas como de la vida actual, y contiene 12 pasos:
 Avidyā: Ignorancia
Samskāra: Impresiones
Vijñāna: Consciencia
Nāma Rūpa: Organismo (cuerpo-mente)
ŞaDāyatana: Seis sentidos
Sparsha: Contacto sensorial
Vedanā: Experiencia sensorial
Tŗşņa: Deseo, querer, anhelo, antojo
‘‘Upādāna’’: Aferramiento mental
Bhava: Voluntad de manifestación (nacer, ser)
Jāti: Renacimiento
Jarā-maraņa: Sufrimiento

Rueda del Dharma.


no matar.
no tomar lo que no es dado.
no mantener una conducta sexual incorrecta: que sea dañina con otros o con uno mismo.
no hablar de manera dañina: mentir, rudeza, ostentación, cotilleo/chismorreo, charla vana.
no tomar o consumir intoxicantes que alteren negativamente la mente.

La meditación (samadhi o bhavana) es la práctica budista por excelencia. El significado del término es "cultivo de la mente". Es por tanto una actividad que supone determinada disposición para que el practicante se sitúe en la realidad y así aumentar su comprensión y sabiduría, que son esenciales para la erradicación de dukkha. Hay muchas y variadas técnicas de meditación budista dependiendo de cada tradición y escuela, si bien todas se basan en dos componentes llamados samatha (calma mental, tranquilidad) y vipassana (conocimiento directo, intuición). En el núcleo central de toda meditación budista hay una observación tranquila y atenta tanto de los propios procesos mentales como de los fenómenos de la vida.

Buda: naturaleza bodhi, nirvana o despertar.
Dharma: el budismo, la enseñanza de budas.
Sangha. la comunidad de budistas.
Dharma (en alfabeto devánagari) es una palabra sánscrita que significa ‘ley natural’ o ‘realidad’.

Lumbini lugar de nacimiento del Buda
Templo de Mayadevi

Lugar en el cual se iluminó el Buda en Bodhgaya

Sarnath Lugar en donde Buda dió su primer sermón